Dicen que están indignados. ¿Ahora os vais a indignar, hijos míos de mi alma, montando la mayor exculpación del Gobierno más inepto que vieron los siglos? ¿Precisamente ahora os vais a indignar? Indignados, no: lo vuestro es indignante.
Es indignante que os indignéis precisamente ahora, y no cuando empezó la crisis y estos tíos la negaban.
Es indignante que a ZP ni lo mentéis y echéis toda la culpa al Sistema. Es indignante que esas pancartas tan «espontáneas» tengan todas el mismo diseño, tipografía, tamaño y colores.
Es indignante que le hayáis dado a la Puerta del Sol ese ambiente de Nochevieja; que sólo falta Belén Esteban en un balcón retransmitiéndolo para Tele 5. Es indignante que aquello parezca una botellona.
Es indignante que no hayáis acampado en La Moncloa, que es donde está el secretario general del partido creador de este Sistema, que en Andalucía llamamos «Régimen». Es indignante que ni mentéis a los 5 millones de parados, ni a los sindicatos del pesebre.
Es indignante que acuséis a los «dos grandes partidos» y que no aludáis ni por equivocación al tercero, al que impide siempre que uno de esos dos grandes partidos gobierne si no saca mayoría absoluta, y propicia sumiso que lo haga el otro mediante los pactos entre perdedores que haga falta, y me refiero a Izquierda Unida, por si no queda claro. Es indignante que no digáis ni palabra contra el Gobierno que creó esos 5 millones de parados, que congeló la pensiones, que rebajo el sueldo a los funcionarios, que ha provocado el 40 por ciento de desempleo juvenil.
Es indignante que os pronunciéis contra el Ejército, pero no contra la absurda presencia de nuestras tropas en lejanos países donde no se nos ha perdido absolutamente nada ni se defiende a la Patria.
Es indignante que reclaméis «democracia real», cuando aquí la tenemos gracias a Dios desde 1975; tenemos democracia real porque la trajo un Rey, el de todos los españoles, que acabó con la dictadura; bendita democracia que ahora permite que liéis la que estáis liando.
Es indignante que el Gobierno incumpla las órdenes de la Junta Electoral para acabar con la presencia callejera de los indignados en tan señalados días de votaciones. Y es indignante que aquí en Sevilla la protesta se haya hecho bajo Las Setas, cuando ninguno de los que están allí protestó contra este Ayuntamiento desforestador y arboricida que despilfarró 20.000 millones de pesetas en esa mamarrachada, ni protestaron contra los ERES, ni protestaron contra el nepotismo del Régimen de Chaves, ni protestaron contra las facturas falsas... ¿Indignados? ¡Tequiyá con la indignación de diseño asistido por ordenador; y yo sé quién es el ordenador, el que la ha ordenado! Yo sé quién lo ha orquestado todo desde las redes no sociales, sino socialistas, para repetir lo mismito que hicieron tras el 11-M y que colocó en La Moncloa al peligrosísimo inútil que nos ha traído esta ruina provocada por una izquierda que siempre se resiste a obedecer a las urnas y a abandonar el poder.